Tarta Sol de Claudia

Belén y Pepe van ha celebrar el primer aniversario de la llegada al mundo, de ese sol, que ha inundado sus vidas, Claudia.

Claudia es una hermosa, simpática y encantadora bebé, que aunque está resfriada (hace poco que ha empezado a ir a la guardería) y sus papis que también lo están (estos últimos no van a la guardería, pero ineludiblemente viven y cuidan de Claudia), cumplen con todos los requisitos formales de crear un maravilloso hogar, rodeados de yayitos, titos y amiguitos.

Cuando trabajaba sobre los detalles de la tarta, me apeteció darle un toque de frescor para transmitir ese maravilloso don de inocencia que caracteriza a los bebés.

Frescor, verde.

Verde, hojas de parra.

Hojas de parra, Adán y Eva.

Adán , inocencia, y Eva, "inicio de vida" (entre manzana y manzana, claro está).

Inicio de vida, el sol de la vida ... Había encontrado la conexión que necesitaba, para unir todos los elementos que uno a uno iban asomando por mi mente. La hadita Claudia vestiría traje con hojitas de parra, decidido.

Al expresar este hilo de pensamientos, pienso en todas esas tartas que veo ... todas esas personas (manos y mente) que hay tras cada una de ellas, quién las pide, para quién son y quién las hace, aunar toda la información y acertar con la ilusión de quién la encarga, para que disfrute con la sonrisa de quién la recibe ... no es tarea fácil, aunque como todos hacemos y deseamos todo con tanto cariño, pues es muy difícil no complacer con lo que elegimos, decidimos y recibimos.

Belén, Pepe ... Felicidades por vuestra hadita Claudia.

Nota: Las dos tartas (base y sol) son de galletas con flan de chocolate. Gracias Isabel ... ¡ayshhh qué cabecitaaaaa!